El Senador de la República Víctor Fuentes Solís aseguró que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha tenido como resultado una crisis social sin precedentes en la historia moderna de nuestro país, debido a las estrategias implementadas para conservar y ampliar clientelas políticas con miras a los procesos electorales.
“La política social del actual gobierno es operada por “superdelegados” junto a los Servidores de la Nación, a partir de un “Censo del Bienestar”, actuando sin ningún control, “aterrizando” programas sociales para mantener adeptos y ganar votos”, apuntó.
Dijo que ejemplo de ello es el mal funcionamiento de diversos programas ya que sólo han servido para hacer creer a la gente que existe un apoyo de fondo cuando en realidad han fracasado.
“Programas como el de Jóvenes Construyendo el Futuro han resultado en un total fracaso ya que desde su inicio en 2018 el porcentaje de personas entre 18 y 29 años de edad que no estudiaba ni trabajaba solo se ha reducido en un punto porcentual, pasando de 24% al 23%. Eso sin considerar los otros 500 mil que dejará la pandemia”, puntualizó.
Asimismo, Fuentes Solís mencionó que la pandemia por COVID-19 está causando estragos a nivel de bienestar social, ante la falta de apoyos adicionales por parte del gobierno de López Obrador.
“Al tercer trimestre de 2020, la pobreza laboral en el país se elevó a 44.5%, es decir, cerca de la mitad de las personas que trabajan no les alcanzó con sus ingresos laborales para adquirir la canasta alimentaria, esto representa 11.6 millones de personas más respecto al primer trimestre de 2020”, explicó.
Por último, el Senador de la república lamentó que el gobierno de AMLO olvidara su compromiso de atender primero a los pobres de México, dejándolos en el abandono, y en su lugar invertir grandes cantidades en la construcción de sus megaproyectos.
“Otra cosa sería si los recursos autorizados en 2020 a las obras del Tren Maya, Aeropuerto Felipe Ángeles y refinería Dos Bocas se hubieran destinado a otorgar un ingreso básico por 3,207 pesos durante tres meses, se hubieran apoyado a 5.2 millones familias, es decir, más de 20 millones de mexicanos”, concluyó.