Los trabajadores que rehabilitan los puentes vehiculares de Pino Suárez y Cuauhtémoc en Monterrey, cumplen con las medidas de sanidad dictadas por las autoridades de salud y que se deben seguirse en todas las construcciones.
El secretario de Obras Públicas municipal, Nazario Pineda Osorio, supervisó este miércoles las acciones en la zona, y comprobó que se sigan las normas de salud como son la sana distancia, centros de lavado, gel antibacterial, tapabocas y horarios escalonados.
También se les toma la temperatura antes de ingresar a sus labores y en caso de detectar a alguno con fiebre, se tiene la indicación de registrarlo en una bitácora y aislarlo para someterlo a análisis y tratamiento.
También informó que ya quedó totalmente demolida la gasa que conectaba el carril de contraflujo de Cuauhtémoc con los carriles exprés de Constitución.
Resaltó la importancia de éstas acciones, porque los puentes ya estaban en riesgo de colapso, lo que podría ocasionar además de daños materiales, la muerte de algún automovilista.
“El alcalde no quiere que pase eso, sabemos que estamos causando molestias, pero es por la seguridad de todos” dijo.
“Con esta obra garantizamos un gálibo, una altura suficiente para que en caso de que llegue a pasar un transporte de carga, transite sin ningún riesgo para él y para la población” añadió.