Con una guardia de honor, un cortejo a pie integrado por un contingente de más de 350 personas, una misa de cuerpo presente y una ceremonia para honrar su memoria, fue como las autoridades del Gobierno Municipal de San Nicolás, compañeros, familiares y amigos despidieron al oficial Gustavo Hernández Dolores, policía que falleció el pasado sábado en cumplimiento de su deber.
El alcalde Víctor Fuentes Solís encabezó el cortejo fúnebre que partió desde las Capillas Protecto Deco ubicadas en la calle Porfirio Díaz y Rayón, en el Centro de San Nicolás, hasta llegar a la Parroquia de San Nicolás Tolentino, donde fue oficiada una misa de cuerpo presente por el Presbítero Benjamín Cáceres.
Acompañando al munícipe estuvieron el Secretario de Seguridad de San Nicolás, Édgar Valencia Moncada, el titular de la Secretaría del Ayuntamiento nicolaíta, Horacio González Delgadillo, mandos de la corporación de seguridad, la esposa del elemento fallecido, Guillermina Rivera Rojas, sus hijos Mauricio, Fátima y Vanessa, de 13, 9 y 5 años, respectivamente, así como hermanos, otros familiares y 300 compañeros policías de la Secretaría de Seguridad.
Al término de la celebración religiosa fue realizada una ceremonia en la explanada de la Plaza Principal en la que, con el féretro al centro, fue montada una guardia de honor por parte de las autoridades municipales y los jefes de la corporación de Policía.
El Comandante Carlos Gerardo Maraboto, Director de la Polisan, dio lectura a la semblanza de Hernández Dolores, posteriormente el Secretario Édgar Valencia Moncada leyó la Oración del Policía y después, Manuel López Valdez, elemento de la Secretaría de Seguridad, dirigió un emotivo mensaje a la viuda, sus hijas y demás familiares.
“Comprendemos que su familia no quiere un héroe, quieren un padre, un esposo y un hermano, pero queremos decirles que un poquito de eso lo encontrarán en cada patrulla, cuando vean a un oficial de Policía, vayan a donde vayan verán con orgullo al familiar que hoy partió…; quienes por el deber cayeron, nunca morirán, se cubrirá su puesto, pero jamás llenarán su lugar”, expresó el compañero del policía caído.
Sobre Hernández Dolores se dio a conocer que nació el 24 de julio de 1984 en San Luis Potosí, entró a la Academia de Policía el 16 de Noviembre del 2007, tres meses después ingresó a la Secretaría de Seguridad de San Nicolás en donde desarrolló una carrera intachable siendo ejemplo de honestidad y valor durante sus nueve años en la corporación.
El oficial era un policía acreditado y aprobado en cuanto a los exámenes de control y de confianza que marca la Ley de Seguridad Pública; contaba con seguro de vida y prestaciones amplias para sus familias con apoyos funerarios, apoyo educativo para sus menores y propuesta de empleo para su compañera de vida.
El presidente municipal indicó que de acuerdo al Manual de Políticas de Recursos Humanos, el personal operativo de la Corporación de Seguridad cuenta con un seguro de vida por 500 mil pesos por concepto de indemnización por muerte en servicio, además, se cubren los servicios funerarios y el servicio médico está incluido para los hijos hasta que cumplan 18 años y para la viuda, mientras no vuelva a contraer nupcias.
Además, se otorgará a la viuda una pensión del total del salario del oficial quincenalmente, durante los próximos cinco años.
Antes de finalizar la ceremonia, se brindó una salva de honor, se realizó el último pase de revista del oficial y el alcalde entregó la bandera del Municipio a la viuda, como máxima insignia y muestra de respeto y admiración ante quien ofrendó su vida para defender la de los habitantes de San Nicolás.
En la explanada de la Plaza Principal estuvieron presentes cerca de 500 compañeros de Hernández Dolores, así como representantes de las Corporaciones de Seguridad Pública de los Municipios de Apodaca, Guadalupe, Juárez y Santa Catarina, y algunos elementos de la Agencia Estatal de Investigación, de la Procuraduría General de Justicia de Nuevo León.
Al finalizar, se informó que el cuerpo de Gustavo Hernández Dolores sería trasladado, como lo dispuso su familia, a San Luis Potosí, para darle el último adiós.
LOS HECHOS
REPORTE POR CASO DE ATAQUE TRAS FRUSTACIÓN DE ROBO DE CAJERO
Alrededor de las 6:30 horas del sábado 20 de Agosto, la Central de Radio recibe el reporte de la unidad 1130 pidiendo apoyo en el Súper 7 de la Avenida Jorge González Camarena y Pensamiento por detonaciones a la unidad, ya que tras impedir el robo de un cajero automático en el interior de un Seven en ese punto, varias personas armadas que viajaban a bordo de un vehículo Bora color rojo, abrieron fuego con armas largas en contra de la unidad 1130, resultando lesionado con varios impactos el elemento de nombre Gustavo Hernández Dolores, que se encontraba en el interior de la unidad en espera del primer elemento que por rutina de vigilancia entró al comercio y sorprendió a los delincuentes, evitando el robo que en ese momento estaban llevando a cabo los sujetos utilizando herramientas hidráulicas para desprender el cajero del suelo.
Los delincuentes salieron corriendo y sorprendieron al segundo elemento que estaba en su patrulla, disparándole con armas largas y dejando gravemente herido al oficial Hernández Dolores.
Luego de cometer el ataque, los sujetos huyeron en el auto Bora color rojo, dejando en el lugar una camioneta tipo Caravan, en la cual, al ser revisada, se encontró un arma corta en el interior y sin los asientos, presumiblemente para el traslado del cajero.
Esta camioneta fue reportada como robada aproximadamente a las 5:00 horas.
De inmediato se brindó auxilio al elemento y fue traslado aún con vida al Hospital Nogalar de este Municipio, con las siguientes heridas: un rozón en la cabeza, un dedo casi cercenado de la mano derecha, tres impactos en el tórax y dos impactos en cada brazo.
Desafortunadamente y luego de una serie de intervenciones quirúrgicas y cuidados médicos, alrededor de las 17:20 horas se reportó el deceso del oficial de la Policía de San Nicolás.
El parte oficial destaca que Hernández Dolores portaba su chaleco antibalas.
Descanse en paz el compañero Gustavo Hernández Dolores.