La fauna y la flora -de ésta especialmente el orégano-, de la sierra Picachos de Nuevo León están amenazadas por la insistencia de una empresa en extraer materiales de dicha elevación, ubicada en el pequeño municipio de Higueras, a 25 kilómetros del aeropuerto de Monterrey.
Aunque también hay insistencia en dependencias como la Semarnat para que se instale, con la expedición del permiso. El último reducto para contener a la concesionaria es que no se le conceda el uso del suelo.
Además de la fauna, está en inminente riesgo de ser eliminado el orégano, considerado el “oro verde” de Higueras, capital internacional de esa planta y que compite en calidad con el que hay en Italia y Turquía, condimento culinario, medicinal y otros usos que se le dan en el mundo.
Lo anterior fue denunciado por Violeta Montemayor, titular de la Asociación Ecológica de la Sierra de Picachos quien dijo que la elevación montañosa está catalogada como Área Natural Protegida con el carácter de Zona sujeta a Conservación Ecológica de Nuevo León.
Montemayor dio a conocer la organización de un programa deportivo el 24 y 25 de octubre en las inmediaciones de Picachos y en la cabecera de Higueras denominado Outdoor Fest en su segunda edición consistente en pruebas de ciclismo, trotes y un duatlón en distintas categorías, con participación de atletas reconocidos en México y el extranjero.
Dijo que el municipio de Higueras donde se localiza Picachos es apenas la “puerta” de la amplia reserva ecológica que abarca siete municipalidades y hay una seria amenaza sobre el sector porque la empresa Matrimar insiste en abrir la sierra y extraer materiales con todas las consecuencias negativas para la zona.
De acuerdo con información en internet, Matrimar es una gran corporación de la industria extractiva cuyas actividades se extienden a Tamaulipas y hasta Texas, Estados Unidos.
Montemayor detalló que en Picachos hay oso negro, lobo gris, águila real, venado y ocelote, entre otras muchas especies, así como encino y pino.
Informó que la empresa Matrimar no ceja en sus ambiciones de explotar la sierra de Picachos sin reparar en el terrible daño ecológico que causaría en amplia zona del estado de Nuevo León.