Por Fanny M.
Amiga entrañable de la Universidad de Monterrey y promotora incansable del arte en el país, doña Márgara Garza Sada de Fernández recibió hoy un homenaje póstumo en esta casa de estudios.
Miembros del Consejo General universitario tuvieron esta tarde una Asamblea Extraordinaria, marco ideal para realizar el reconocimiento público que incluyó la develación de una placa, el ofrecimiento de un minuto de aplausos y la inauguración de un altar en su honor.
Uno de los momentos más emotivos de la tarde fue cuando integrantes la familia de la benefactora subieron al estrado del Teatro UDEM para develar la placa conmemorativa, mientras directivos académicos, maestros, colaboradores y alumnos, reunidos en el teatro, fungían como espectadores.
En la hoja de acero descubierta, se grabó una frase que solía decir la filántropa: “Siempre hay que buscar y no descansar hasta ver los sueños convertidos en realidad”, junto a la leyenda: “Hoy la Universidad de Monterrey rinde homenaje a doña Márgara Garza Sada de Fernández por hacer posible que nuevas generaciones cristalicen sus anhelos. Octubre 2014”.
La placa fue develada por Victor Zorrilla Vargas, presidente del Consejo de la UDEM, quien recordó la convicción de la empresaria de que la educación es algo que puede cambiar la vida de la gente, pero no solo en referencia a la instrucción académica, sino a todas las experiencias que alimentan el espíritu.
“Por eso donde veía que faltaba, ella aportaba; donde había tierra fértil, sembraba; y donde encontraba la rara mancuerna de talento y disciplina, respaldaba”, asentó en su mensaje ofrecido a la comunidad UDEM.
Sin embargo, continuó el directivo, doña Márgara se alejaba de los reflectores; era discreta; no hablaba de sus obras; y mencionó que su trayectoria le mereció que en 1995 la Fundación Amparo, de Puebla, la nombrara “Patrona de las artes”.
“Y es que doña Márgara tenía muy clara la diferencia entre caridad y filantropía. La clave está en la continuidad, en el impacto que cada gesto tiene con el paso del tiempo”, estableció.
Así como su padre donó los terrenos para levantar el campus de la Universidad de Monterrey, años más tarde ella propuso y apoyó la edificación del Centro Roberto Garza Sada de Arte, Arquitectura y Diseño.
“Con él, Doña Márgara acercó la cultura a los jóvenes para catapultarlos hacia nuevas oportunidades, para que fueran capaces de alcanzar nuevas metas y de cristalizar sus anhelos”, indicó.
Zorrilla Vargas afirmó que doña Márgara fue un testimonio de sensibilidad y de arrojo para con las artes; de amor por lo mexicano y de fuerza para llevar a buen fin cada objetivo; de desprendimiento y de entrega.
En este acto estuvo presente el rector Antonio J. Dieck Assad, así como los vicerrectores Fernando Mata, Académico; Isabella Navarro Grueter, de Formación Integral; Agustín Landa, de Desarrollo y Patricio de la Garza Cadena, Administrativo.
Asimismo, la familia de la extinta promotora cultural también estuvo durante este emotivo homenaje.
Después de la ceremonia de develación de la placa, los asistentes fueron invitados a pasar al lobby del Centro de la Comunidad Universitaria (CCU) para apreciar un altar de muertos, elaborado por José Luis García, apoyado por estudiantes de diferentes carreras de la UDEM.
El artista plástico explicó que esta obra de arte efímero hace patente el amor de la homenajeada por el arte mexicano y las tradiciones, y en donde algunos elementos reflejan también su impulso y su espíritu generoso.
La instalación abre con un arco principal, ornamentado con figuras realizadas con flores de la región del sur de México; a sus lados, unos vestidos artesanales a los que, en lugar de extremidades, les brotaban ramas de árboles.
Tras un andador decorado y rodeado de veladoras, al fondo, se instaló el altar, coronada con un dibujo al carboncillo de doña Márgara, mientras al pie yacen fotografías antiguas, libros de museos relacionados con su labor promotora, piezas artesanales de barro, frutas, calaveras de azúcar y flores de cempasúchil.
Luego de la explicación ofrecida por el artista a los familiares de Garza Sada de Fernández, los asistentes escucharon música de la Orquesta Pasatono.
Desde esta tarde, dicha instalación puede ser apreciada no solo por la comunidad universitaria, sino por toda aquella persona que muestre interés en conocerla, previo aviso de su visita al campus de la UDEM; estará montada, al menos, hasta este jueves.
Márgara Garza Sada de Fernández falleció el pasado 17 de julio a los 88 años de edad. Fundó “Promoción de las artes” y el Planetario Alfa en la década de los 70; los Museos Tamayo y Franz Mayer en los 80; y el Museo de Arte Contemporáneo y el de Historia Mexicana en los 90, entre otras obras.